El Museo Tiflológico cumple 25 años tocando el arte

La ONCE ha incorporado el sistema de información acústica BeepCon

No hay en el mundo un espacio tan grande y con tantos recursos artísticos dedicados a las personas ciegas y discapacitadas visuales como el Museo Tiflológico de la ONCE (www.museo.once.es), que este mes celebra su 25º aniversario.

Con motivo del mismo, este año que termina han tenido lugar en sus salas distintas actividades, entre las que se encuentran las exposiciones retrospectivas de pintura, fotografía y escultura (en total, 36 artistas que han ofrecido una visión global de la trayectoria del museo); el concurso de artes plásticas (el 14 de diciembre tendrá lugar la entrega de premios y una mesa redonda conmemorativa del aniversario); un ciclo de conferencias sobre cultura clásica, en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid, o, de puertas para afuera, la exhibición itinerante que el Tiflológico ha llevado por toda España, para acercar a los ciudadanos sus colecciones de artistas, maquetas arquitectónicas y elementos de tiflología.

Este último año el espacio ha incorporado, además, el inglés a sus visitas guiadas (para todos los públicos), ha recibido más público que nunca (cerca de 15.000 personas, entre visitas individuales, de familias y de grupos como colegios o centros culturales y de mayores) y ha empezado a trabajar con el sistema BeepCon, que a través de una aplicación de móvil ofrece al visitante información sobre las obras expuestas y la localización de las balizas sonoras, lo cual le permite moverse con mayor facilidad y saber dónde está colocado un cierto cuadro, el mostrador de recepción o los aseos.

“Cuando se inauguró, el Tiflológico era un escaparate de las tecnologías del momento. Ahora, a los títulos en Braille, las audioguías, las balizas de detección de presencia y los códigos QR hemos sumado este sistema, que facilita la información acústica en privado, haciendo uso de los auriculares de nuestro smartphone”, explica María José Sánchez, la coordinadora del centro, que ha sido el primero de España en implantarlo.  

Las personas ciegas como creadoras

En este cuarto de siglo, el museo de la calle de La Coruña, 18, que fue diseñado por los propios afiliados a la ONCE, ha cumplido sus objetivos fundacionales, según su coordinadora, paciente de retinosis pigmentaria: “Acercar el arte a las personas ciegas, que pueden tocar, conocer y reconocer los monumentos que no estaban a nuestro alcance; la recopilación de los principales elementos de tiflología, que hablan sobre el acceso a la información y la cultura, y la puesta en relieve del papel de las personas ciegas como creadoras”.

María José Sánchez, quien reconoce que, en general, queda mucho recorrido para alcanzar la igualdad de oportunidades, habla de otro objetivo que, aunque no escrito, resulta muy importante y es la labor de sensibilización de este espacio. “Mostrar a la sociedad otra forma de reconocer el arte, a través del tacto, y considerar a las personas ciegas desde una perspectiva no sólo de superación personal, sino de admiración por su capacidad creativa, por ser capaces de hacer cosas realmente admirables”, defiende, como, por ejemplo, tallar una escultura en madera. “Me gusta pensar en ellos como artistas”.

Cristina Sánchez