“Necesitamos despertar, y la música es el mejor vehículo para enviar mensajes”

Brisa Fenoy, una de las actuaciones estelares de las fiestas

Laura Conde

Esta cantante algecireña compone, produce e interpreta, y ha conquistado el panorama del pop electrónico español con sólo 26 años. Brisa Fenoy empezó a tocar el piano a los ocho años en el Conservatorio y compuso su primera canción a los 12. Además, es modelo desde los 19 años y tiene su propia línea de ropa. Comprometida con causas sociales, como la de los inmigrantes que cruzan el Estrecho –tema central de su single ‘Jericó’–, se ha convertido también en la imagen de ‘Topmanta’, la marca creada por los manteros en Barcelona.
Brisa saltó a la fama tras componer para la edición de Operación Triunfo de este año ‘Lo malo’, que interpretaron Aitana y Ana Guerra. Brisa versionó la canción ‘Bad Boy’ de Morgan y Will Simms, para defender la candidatura española a Eurovisión. Quedó en tercer puesto, pero consiguió ser número uno en Spotify España y número seis en la lista global, superando los dos millones de reproducciones en dos días. Este mes es una de las artistas estelares de las Fiestas de Tetuán, donde actuará el 29 de junio.

Las reivindicativas letras de tus canciones encajan en un distrito tan multicultural como Tetuán. ¿Cómo surgió tu nuevo single ‘Jericó’? ¿Cuándo estrenas el documental homónimo?
Desde que empecé mi carrera en mi adolescencia, ya componía sobre esta temática. Siempre me ha indignado la desigualdad y la injusticia, en todas sus vertientes. El documental está en proceso de grabación aún, pero adelantamos un corto del documental el pasado 20 de junio, Día de los Refugiados. Ahí explicó por qué quise hacer ‘Jericó’, y por qué emprendí este documental junto con ‘Human Produce’, la productora del videoclip.

¿Crees que la acogida del ‘Aquarius’ supondrá algún cambio en la política migratoria española y de la UE?
Es positivo que el Gobierno quiera acoger, pero tenemos que ser conscientes de que llegan ‘Aquarius’ a nuestras costas cada semana. Tenemos que estimular que estas políticas de acogida sean continuas en España y en la Unión Europea. Yo sumo premisas a ello: toda persona que necesite ayuda urgente tiene que ser protegida, el sistema de protección de un pueblo tiene que ayudar a todo ser humano en situación de debilidad; los gobiernos no ponen más recursos, sino que reparten lo poco que dedican a políticas sociales entre más gente. Esos recursos tienen que incrementarse, el culpable no es el inmigrante que viene a quitarte tu ayuda, el culpable es el Estado, que no pone lo que debería poner y hace que te sientas discriminado, y como un competidor del otro pobre; en tercer lugar, desarrollando sistemas de acogida no podemos sentirnos satisfechos ni mucho menos, porque no damos respuesta a la grave causa que generan las migraciones. Aquí todos recogemos el agua que cae de una tubería rota, en vez de arreglar la tubería para que no salga más. Son víctimas de un genocidio a nivel mundial, y tienen que escapar de unas atrocidades que están contemplando todos los gobiernos del mundo, y nadie está actuando sobre la causa primigenia.  
Ayudemos a la reconstrucción de esos países con programas de ayuda real. Fomentar las microempresas, la economía sostenible, ayudémosles a los canales de comercialización. No hay que dar dinero, sino generar una política real de ayuda. Con orientación, formación, producción... Necesitan desarrollo. Y generar un entorno donde la migración no tenga sentido. Para eso hay que trabajar y enfrentarse con las grandes empresas, que están allí explotando a su gente y a su tierra.

¿Cómo llevas la presión de haber triunfado tan joven en un sector tan difícil? ¿Cómo definirías tu estilo?
Mi misión es lanzar mensajes concienciadores a los jóvenes y a la sociedad, a través de un vehículo que es directo y les llega rápido. Necesitamos despertar, y la música es una de las mayores plataformas para mandar mensajes. Es el mejor vehículo. Los artistas tenemos la responsabilidad social y humana de transformar y construir a través del arte. El arte siempre ha sido un mecanismo para cambiar y reivindicar. Triunfar no es mi éxito, mi éxito es ayudar con mi música a ser mejores humanos y dejar el mundo mejor. Y cuando me vaya, no dejar hueco, sino huella. Por todo ello, siempre he procurado generar música con contenido.

¿Lo de convertirte en la embajadora de la marca ‘Topmanta’, fue una propuesta tuya o del colectivo?
Fue una propuesta mía, en un evento de ‘Playground’ que exponíamos y ofrecíamos nuestros recursos para ayudarles a crecer. Yo me ofrecí, ya que he trabajado como modelo durante siete años, y puedo con mi imagen y figura pública ayudarles en la difusión y lograr cambios reales. Que las personas sean ilegales, pero la ropa no es algo paradójico y que choca al instante. Ropa legal hecha por gente ilegal. Me parece que es un golpe en la mesa y una dosis de realidad.

También te has acercado al feminismo, a la igualdad de género y a las violencias machistas, tanto con ‘Lo malo’ como con tu primer single, ‘Ella’. ¿Hasta qué punto ha influido el 8 de marzo en la sociedad española? ¿Mucha gente se está subiendo al carro del feminismo, porque “vende”, o por verdadera conciencia?
Quiero pensar que es porque realmente lo sienten. Creo que es un hecho que necesitamos igualdad en todos los aspectos, y sé, sin duda, que la población está concienciada en reivindicar sus derechos, y las mujeres estamos despertando. Ahora estoy colaborando con ‘Anabella’ en hacer charlas y eventos en universidades y otras instituciones culturales. Con mi último single ‘Free’ hemos conseguido hacer una alianza potente. Creo que mis canciones pueden ir más allá. Que acaben en hechos y se ejecuten acciones. Utilizar el sistema, marcas, empresas… para enviar nuestro mensaje a la sociedad, me parece inteligente. Y en el sistema capitalista es lo más sensato, para poder realmente concienciar a través del entretenimiento.